¡Clubes STEM una realidad en Bogotá!
Los Clubes STEM son una experiencia educativa dirigida a estudiantes de los grados 4 y 5 de básica primaria que se desarrolla en alianza entre la Secretaría de Educación del Distrito (SED) y la Corporación Maloka.
ESCRITO POR: MALOKA
Como una experiencia educativa que contribuye a enfrentar los desafíos del siglo XXI a través de la formación en ciencia y tecnología surgen los Clubes STEM producto de un trabajo mancomunado entre la Secretaría de Educación del Distrito (SED) y la Corporación Maloka.
El objetivo de los Clubes STEM es promover la apropiación social del conocimiento en ciencia, tecnología, ingenierías y matemáticas (STEM por sus siglas en inglés) en la escuela a partir de una experiencia educativa que fortalece las habilidades y actitudes científicas de niños y niñas de educación básica primaria en un momento en el que Bogotá fue declarada territorio STEM.
María Cristina Díaz, presidente ejecutiva de Maloka resalta que, para Clubes STEM “es importante el reconocimiento e intercambio de saberes entre las comunidades educativas y el equipo de Maloka. Además, incentivamos el autorreconocimiento de las destrezas y capacidades con las que los estudiantes cuentan para producir conocimiento”.
Clubes STEM tiene actividad presencial durante todo el año escolar en 6 localidades de la ciudad: Usme, Ciudad Bolívar, Usaquén, Chapinero, San Cristóbal y Suba. Además, trabaja con dos IED rurales, haciendo un trabajo educativo en zonas periféricas de la ciudad. Y también contempla la posibilidad de abrir sus espacios en las sesiones con estudiantes para invitar a otros actores de las comunidades educativas como familias, vecinos y estudiantes de otros grados.
Clubes STEM le da un valor inconmensurable a la curiosidad y vitalidad de niños y niñas de Bogotá con la idea de formar ciudadanías para el siglo XXI en el pensamiento científico y tecnológico.
Algunos principios de los clubes STEM giran en torno a pensar en los estudiantes como actores centrales del proceso, promover que todos los niños y niñas pueden aprender, tener oportunidad de hablar y ser escuchados y que, todo el conocimiento suma.
Asimismo, se estimula en los menores la capacidad de escucha; se valoran los diferentes puntos de vista sobre una situación, asunto o problema; se promueve el cuidado propio y colectivo; se estimula la observación de las realidades y los entornos partiendo de la curiosidad para plantear preguntas sobre los fenómenos, situaciones u objetos observados en su entorno y adicionalmente, se trabaja en torno a la tolerancia para proponer soluciones con el intercambio de perspectivas y el trabajo en equipo.