En esta conversación sobre la verdad en la educación, se profundizó sobre la importancia de la validación para la construcción del presente histórico. Y es que, durante mucho tiempo se han realizado diversos ejercicios de memoria, con perspectivas subjetivas individuales y colectivas, por eso, se volvió fundamental migrar hacia ideas objetivas, que se puedan aseverar.

De acuerdo con Lucía González, en la Comisión de la Verdad se realizaron alrededor de 30.000 escuchas, para hacer un análisis, seleccionar los factores de persistencia – en donde se ancla la guerra- y así, construir un relato comprensivo de la historia, brindando herramientas a los profesores, a los líderes y a la sociedad en general, para reflexionar juntos sobre cómo podemos salir de la guerra y dejar un legado pedagógico.

Se desarrollaron 33 herramientas pedagógicas, que buscan posicionar la verdad para la construcción de un futuro con miras a la no repetición. Estos recursos, fueron diseñados para niños y jóvenes, dentro o fuera del aula, pues la importancia de este legado parte de la construcción colectiva, del reconocimiento de la diferencia y del entrenamiento en la deliberación, en cualquier circunstancia.

La jornada cerró con varias reflexiones en torno a las aulas como espacios dialogantes, a la riqueza de la diferencia para la construcción y a la importancia de la educación en la resolución del conflicto.